Si, tres veces Pe..!! jajaja, lo conocí un día de invierno en Boston, mientras nevaba y yo meditaba si valía la pena salir a fumar un cigarro, y pensaba que sustento tenía que tener para convencer a Lilu de que entre a Match.com Bueno pensé antes de convencerla primero debo explorar y así lo hice, me inscribí con el nombre de mi amiga, (igual suele hacerlo ella) me registré y esperé que la vida me sorprendiera.
Pues la vida me sorprendió, fui tan afortunada que me tocó un cuarentón (nada de niños pensé) muy seguro de si mismo, soltero afirmaba él y según procalamba independiente y viajero. Bueno, pensé se asemeja a mi perfil, por meses mantuvimos conversaciones simpatiquisimas, divertidas, sinceras, cordiales, subidas de tono, etc., etc., etc., El presionaba para conocernos, yo no estaba convencida, y así estuvimos en este juego del gato y del ratón por un tiempo. Mientras tanto, yo le contaba a Lilu de lo bien que me iba y ella pagaba su suscripción trimestral a Match.com
Bueno tras consultarlo con mi almohada, mi amigo "el que todo lo sabe", y otros metiches más. Acepté salir, escogí yo el lugar, un bar ubicado a 1 cdra de la casa de mi amiga Ursula, y no solo eso, coordiné con otro amigo para que a determinada hora "cayera" por ahi por si las moscas (como verán mujer precavida).
Coordinamos cuando me llama 3 horas antes de la reunión para cancelar con la excusa que estaba en una reunion de trabajo que iba a demorar más de lo debido. Yo por supuesto le dije que no había ningún problema que luego coordinabamos (entre sorprendida y aliviada) y así fue como que mi cibernovio desapareció.
Desapareció por unos meses lo veía conectado pero no escribía yo tampoco. Regresé nuevamente a Boston y pasaron los meses, mi amiga Lilu seguía con sus varios cibernovios y saliendo con un tipo de carne y hueso que conoció en el gym. Yo prepara nuevamente mi retorno y coordinaba por el chat mis reencuentros con amigos y entre ellos estaba mi amiga Pepe (nótese 2 Pe) así que pulsé emocionada mientras escibía y le decía muy frescamente "¿Ya sabes adonde me vas a llevar el sábado? ¿Espero que no sea al mismo lugar de siempre?" - refiriendome al pub que siempre ibamos - "No seas tacaño" seguía yo.
Mientras esperaba respuesta de mi 2Pe, me dí cuenta que había estado escribiendo a 3Pe.
Y el fresco este reapareció con su frase corrientona de galan barato "Yo te llevo a donde tu quieras ir, muñeca" (puajjjjjjjjjj casi vomito).
Lo saludé brevemente y le dije: "Disculpame, me equivoque de Pepe" y con un lindo emoticom ;) desaparecí de su ciber espacio, previo bloqueo.
Esta es mi humilde historia, ahora he escuchado algunas de terror y también tengo unas lindas historias de amor. Ya en otro momento les contaré pero ahora espero tu historia de amor, terror u odio.
Bye,
Glen